Me sumo al apagón cultural de 48 horas

los ministerios de Cultura, Hacienda y Trabajo y Economía Social deben convocar inmediatamente un encuentro virtual con artistas y profesionales porque parecen desconocer nuestra realidad

Y

o, Eva Yerbabuena, artista y propietaria de una compañía de danza, me veo obligada a hacer un comunicado. Quiero mostrar mi rechazo a las declaraciones hechas en el día de ayer por ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes. Por ello, y teniendo en cuenta el grado de impotencia, frustración, incertidumbre y miedo que estamos atravesando con respecto a la ausencia de medidas específicas de apoyo al sector cultural, me sumo al apagón cultural que en redes sociales se llevará a cabo los días 10 y 11 de abril.

La cultura es un motor económico en España que está resultando esencial en el confinamiento

Considero que el gobierno muestra una concepción errónea de la cultura en nuestro país, concediéndole muy poca importancia. Si se actúa así, se ignora que el arte y la creación están siendo bienes esenciales en un momento como este. ¿Cómo pasaríamos este confinamiento sin leer, escuchar música o ver una serie?

Además, al ignorar a un sector como el de las artes escénicas y la creación cultural en general, este gobierno nos está haciendo ver que no es consciente de que la cultura que hacemos en España es también un motor económico. Nuestro sector genera riqueza, empleo, proyección internacional y, no lo olvidemos, contribuye a las arcas del estado con sus impuestos.

Mi trabajo es intermitente

Desde el colectivo de artistas no estamos pidiendo un trato de favor sino un trato específico porque nuestra situación también lo es. El trabajo que desempeñamos no es ni temporal ni fijo, sino intermitente. Sin embargo, mi relación con los impuestos es sistemática y se lleva a cabo de manera regular. Pero las medidas del gobierno nos dejan fuera de las opciones ayuda.

Mientras tanto vemos cómo nuestros países vecinos ponen en marcha planes estratégicos en el sector cultural. De hecho, Francia, Alemania e Italia tienen desde marzo presupuestos específicos que inyectan dinero en nuestro sector.

Que en una situación como esta que atravesamos lo primero es salvar vidas, lo tengo clarísimo. El colectivo de artistas no hemos negado eso nunca. Pero para vivir hay que comer y en mi compañía hay varias familias que tenemos la costumbre de hacerlo al menos tres veces al día.

Un llamamiento a los ministerios de Cultura, Hacienda y Trabajo y Economía Social

Si el arte y la cultura son importantes en mi vida, en estos momentos lo están siendo aún más. Precisamente ayer me daba un paseo imaginario por Granada y escribía sobre lo esencial que resulta para nuestra salud poder recurrir a una canción, un libro o una película.

Por ello he querido sumarme al apagón cultural de 48 horas en redes sociales como única medida de protesta ya que, en esta situación que padecemos es poco lo que podemos hacer para mostrar nuestra disconformidad. Una disconformidad que es también miedo, incertidumbre e impotencia.

Como artista y empresaria de la cultura, exijo al ministro de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes, que asuma de una vez la dirección de su ministerio así como las responsabilidades que este conlleva. Rodríguez Uribes debe convocar a los representantes de los profesionales de las artes escénicas y la cultura a un encuentro virtual para que tome conciencia de la realidad que estamos atravesando y que parece no conocer. Además, al tratarse de una cuestión transversal, deberían también posicionarse las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz.

Y, para terminar, hago un llamamiento a mis compañeros de profesión. Debemos olvidarnos del ego y la desconfianza y trabajar todos juntos. Es necesario crear una estructura firme que nos proteja ahora a nosotros y en el futuro a las siguientes generaciones de artistas.

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